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Más de 800 catequistas y líderes de catequesis de las parroquias de todo el Bronx, Manhattan, Staten Island y la parte sur del condado de Westchester asistieron a talleres y se unieron para la misa y otra oración en el Foro Anual de Catequesis, el 21 de octubre en la escuela secundaria Cardenal Spellman en el Bronx.
El tema de la jornada, la cual contó con talleres en inglés y español, fue la Misericordia.
(Una segunda sesión del foro para catequistas de los condados al norte de la arquidiócesis se llevará a cabo en la parroquia del Sagrado Corazón en Monroe, el sábado 29 de octubre.)
La misa de apertura en Spellman fue celebrada por el padre Thomas Lynch, párroco de la parroquia de Nuestra Señora de los Ángeles en el Bronx.
Casas editoriales católicas y otros vendedores y proveedores expusieron sus productos.
El padre Francis Amodio, O. Carm., director de la pastoral universitaria en la universidad de Mount St. Mary en Newburgh, presentó un taller sobre el tema: “¿Cómo Nos Convertimos en Misericordia los Unos a los Otros?”
El papa Francisco nos llama a entender la esencia de Dios, dijo el padre Amodio, quien explicó que las Obras Corporales y Espirituales de Misericordia ofrecen una buena forma de practicar lo que el Señor busca de nosotros.
“Usted no puede llevar a cabo las Obras Corporales y Espirituales de Misericordia, tal como Dios lo hace, si usted no sabe quién es realmente Dios”, dijo el padre Amodio.
“Jesús es la carne de la misericordia de Dios y él nos dice que amemos a nuestros enemigos, que nos amemos los unos a los otros como a sí mismos, y esto lo hacemos a través de los Trabajos de la Misericordia”.
Sori Govin es la especialista bilingüe en ventas de la compañía publicitaria RCL Benziger Publishing. Una nativa de Miami, Florida, la señora Govin ha servido en los ministerios de catequesis durante más de 20 años en su propia parroquia.
Ella pronunció el discurso principal en español, “La Vida de un Discípulo: Alegría y Misericordia”. El debate interactivo se llenó de reflexión personal y meditación. Ella recordó a su audiencia que todos estamos llamados a ser discípulos de Dios.
Ella hizo varias preguntas al principio: “¿Nos atrevemos a escuchar su llamado cuando él nos habla? Debemos ser discípulos felices, pero ¿de dónde obtenemos esta alegría? ¿Qué es lo que nos inspira?”
La señora Govin explicó: “Nos preparamos para nuestra vocación al desarrollar y construir nuestra relación con Dios. Tenemos que abrir nuestros corazones y no tener miedo de amar a Dios en persona”.
La hermana Joan Curtin, C.N.D., directora de la Oficina de Catequesis de la Arquidiócesis, dijo a CNY estar contenta con la participación que se dio durante la jornada, y ella espera que los asistentes se vayan rejuvenecidos en cuanto a su trabajo y visión.
“Yo espero que cada catequista o cada director de educación religiosa se fortalezca en su fe y tenga un mayor entusiasmo al regresar a casa y en su tarea evangelizadora llevando así a las familias más cerca de Jesús”, dijo la hermana Joan.
Carol Camacho-Carpenter de la parroquia del Santísimo Sacramento en el Bronx, quien ha sido una catequista por 25 años, estuvo de acuerdo con la reflexión de la hermana Joan.
“Me encanta que ellos hagan esto”, dijo Camacho-Carpenter a CNY al hablar acerca del foro. “En realidad esto nos da a muchos de nosotros la oportunidad de compartir nuestras experiencias, de aprender nuevas maneras de compartir nuestro mensaje. También nos da a los profesores la oportunidad de educarnos más y nos da más herramientas para su uso en el aula de clases”.
