Estatua de Nuestra Señora de El Cisne Regresará a la Catedral el Próximo Mes

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La misa anual en honor a Nuestra Señora de El Cisne, patrona de Ecuador, programada en la Catedral de San Patricio el domingo 26 de septiembre, celebrará “la fe, la cultura y la tradición”. La estatua nacional ecuatoriana de Nuestra Señora de El Cisne regresará después de haber estado ausente en la misa de 2020.

Una gran procesión por la calle tendrá lugar antes de la misa de las 4 p.m. por la Quinta Avenida desde la calle 72 hasta la catedral. Los organizadores dijeron que se espera que unas 3.000 personas, incluyendo un contingente de Caballeros de Colón, participen en la procesión, la cual contará con la estatua nacional.

La estatua ha estado presente antes para la misa anual en la catedral y durante las misas anuales de Nuestra Señora de El Cisne en la parroquia de la Asunción en Peekskill, donde la mayoría de los feligreses son del Ecuador o de ascendencia ecuatoriana. La misa en la catedral se empezó a dar en 2017 y en la Asunción hace 20 años. Debido a las restricciones por la pandemia, el año pasado no hubo procesión por la Quinta Avenida y otra estatua de Nuestra Señora de El Cisne de la Asunción fue exhibida en la misa de la catedral.

“La devoción a Nuestra Señora de El Cisne es la devoción mariana más grande en Ecuador”, dijo el padre Esteban Sánchez, párroco de la Asunción, a Catholic New York en una entrevista por teléfono el 17 de agosto desde su Ecuador natal, señalando la importancia de “la presencia de la Virgen María” durante las celebraciones marianas.

El cardenal Dolan será el celebrante principal de la misa en San Patricio, y el homilista programado para ese día es el arzobispo Marcos Pérez de Cuenca, Ecuador.

El padre Sánchez está de vacaciones en su amado Ecuador mientras también hace arreglos para que la estatua nacional sea transportada a Nueva York el próximo mes. “Será la cabeza de la Iglesia en Nueva York junto con la cabeza del santuario aquí en Ecuador, dándonos a Jesús a través de Santa María. Será un evento muy grande e importante para nosotros”, dijo el padre acerca del cardenal Dolan y el arzobispo Pérez celebrando juntos la misa en la catedral.

“Como ecuatoriano, estoy muy contento ...Mi corazón es ecuatoriano y mi alma es de Nueva York”.

La misa anual de El Cisne en la Asunción de este año se celebrará el 22 de septiembre a las 3 p.m., también precedida por una procesión por la calle. Dos sacerdotes estarán de visita desde el Ecuador para celebrar la Misa de la Asunción, uno de ellos actuará como celebrante principal. El padre Sánchez estará entre los concelebrantes.

“Esto es importante porque ella (Nuestra Señora de El Cisne) viene a visitarnos y a unir a todas las personas de la comunidad ecuatoriana”, dijo el diácono de la Asunción Carlos Campoverde a CNY por teléfono desde Peekskill la semana pasada. “Y continuar la fe y unir familias”.

El diácono nacido en Ecuador también señaló que, con las misas, las procesiones, y la presencia de la estatua nacional en Manhattan y en Peekskill se trata de “mantener la cultura y la tradición”. El padre Sánchez se desempeña como capellán arquidiocesano de la comunidad ecuatoriana. El diácono Campoverde es coordinador del ministerio hispano en la parroquia de la Asunción.

Beatrize Tenezaca, feligresa de la Asunción y coordinadora del Comité Arquidiocesano de Nuestra Señora de El Cisne, dijo: “Santa María es nuestra madre espiritual; esto es muy importante en la evangelización. Crecí con devoción a Nuestra Señora de El Cisne”.

La señora Tenezaca, nacida en Ecuador y madre casada de tres hijos, señaló que esta devoción tiene un gran significado para ella, su familia y la comunidad ecuatoriana. “Cuando ella (la estatua nacional) llega, nos consuela”, agregó la Sra. Tenezaca. “Ella nos da la fuerza espiritual para seguir adelante”.

La estatua nacional de Nuestra Señora de El Cisne mide casi un metro y está hecha de fibra. Es una réplica de la histórica estatua de Nuestra Señora de El Cisne de Ecuador, esculpida en 1594, la cual está hecha de madera y mide casi dos metros de altura. Ambas estatuas se guardan en un santuario en la ciudad de El Cisne en la provincia sureña de Loja en Ecuador.